El dia que Brusa noqueó al "Zorro" Pereyra.

por Enrique Sanchez el que mas sabe de boxeo en toda república argentina

Tanto Amilcar Brusa como Eugenio Pereyra, son dos símbolos autenticos del boxeo santafesino, con las diferencias logicas.
Brusa, fue uno de los tecnicos que primero se destacó en la region, que luego se lanzó a la fama a traves de Carlos Monzón. El segundo, por ser fundador del Ñaro Boxing Club, uno de los gimnasios mas antiguos de Argentina y de los mas prestigiosos promotores del interior del pais, entre las decadas del 50' y el 80'.

Corrian los años finales de los 70'. Durante una disputa de los viejos campeonatos nacionales amateurs en Buenos Aires, en el que participaban pugiles de todas las provincias, y cuyos ganadores formaban parte de los seleccionados que representaban al pais en las competencias internacionales, tiene lugar esta pequeña anecdota , que no muchos conocen.

La Pcia de Santa Fe (norte y sur), estaba dividida en dos, boxisticamente hablando. Por esa razón es que tenía dos pugiles por categoria.
Lo cierto es que durante uno de estos eventos, Pereyra y Brusa coincidieron como tecnicos de las delegaciones. El primero por los de la zona sur y el otro por los de la norte.

Llegando a los tramos finales, Brusa tenia solo un pupilo en competencia (los demas habian sido eliminados y por ende habian vuelto a sus hogares), en tanto Pereyra habia logrado que varios de los suyos arribaran las instancias finales.
En un momento dado, en pleno entrenamiento, Brusa se dirigió al Zorro y le dijo:
-"¿Pereyra, podemos hacer guantear a uno de tus muchachos con mi pupilo porque no tiene quien le ayude?"
A lo que Don Eugenio contestó:
-"Disculpame, pero no puedo. Si se entera Tito Lectoure que un pupilo mio ayudo a uno tuyo se va a enojar y no quiero que eso pase".

Eran tiempos en que la pelea Brusa-Luna Park (Lectoure), por diferencias en el manejo de Monzón y que dejo a Lectoure fuera del equipo, estaba en pleno apogeo. El pais boxistico estaba aliado a Lectoure.
La respuesta de Brusa (casi 2 mts y mas de 100 kg), fue un sonado cachetazo que dio de lleno en la cara del diminuto Pereyra (1,60 mts y no mas de 60 KGs) , que derrapó uno cuantos metros, hasta que unos cajones amontonados detuvieron su andar.

Luego de este incidente, Brusa jamás le volvió a dirigir la palabra a Pereyra , un viejo amigo, que cobijó a Monzón muchas veces en el Ñaro, cuando aquel tenía problemas con la justicia y que le enviaba muchas veces rivales de poca monta que servian para engrosar el record de Carlos.
En tanto el veterano "Zorro" nunca hizo mención del asunto y cuando se referia a Brusa solo decia:
"Ese si es todo un señor..........."