Por Hilmar Rojas Erazo
Era el año 1971 cuando el venezolano Vicente Paul Rondón exhibía orgulloso la faja de campeón semi pesado de la Asociación Mundial de Boxeo, que había ganado por nocaut en el sexto asalto a Jimmy Dupree en Caracas.
Unos meses después, repitió la dosis ante el italiano Piero del Papa, y en julio hizo una pelea sin título en juego. El 21 de agosto de 1971 se midió a Eddie Jones en el Nuevo Circo de Caracas. El recinto se llenó para ver al flamante campeón, quien retuvo por segunda vez su corona, ahora por tarjetas en 15 asaltos.
En octubre viajó hasta Berlín para medirse al local Conny Velensek, en otro pleito sin cinturón en disputa. Luego se marchó a Miami, donde venció al bahameño Gomeo Brennan a quien venció por TKO 14.
Rondón aceptó su cuarta defensa, ese mismo año 1971. La pautaron para diciembre ante el estadounidense Doyle Baird, en Cleveland. El venezolano solo necesito ocho rounds para despachar a su rival.
Para entonces, Rondón tenía récord de 36-5-1 y cada vez que podía pedía a gritos al estadounidense Bob Foster, para unificar sus títulos. La deseada pelea se realizó en abril de 1972, en Miami, y tan solo duró dos asaltos, con la derrota por KO para el venezolano.
Así como fue de exitoso el año 1971 para Rondón, fue de desastroso el año siguiente en el cual no solo perdió el título mundial AMB sino además fue derrotado en otras dos oportunidades. En total sumó tres derrotas ese año y fue el inicio de su declive.
Se retiró en 1974 con marca de 39-15-1, 22 KO´s. Seis de sus 15 derrotas fueron tras perder la corona ante el estadounidense Bob Foster.
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